Existe la creencia de que limpiar las alfombras con vapor puede generar moho. Algo, que por supuesto, no es más que un mito. El moho, prospera en condiciones sucias, húmedas y oscuras.
Por tanto, si realizamos una buena limpieza de las alfombras con vapor, conseguiremos eliminar gérmenes, bacterias y virus gracias a las altas temperaturas.
Nuestro consejo para una buena limpieza e higienización de las alfombras, sería primeramente realizar un aspirado profundo de la misma, con lo que conseguiremos remitir el polvo incrustado. En ocasiones, existe el mito de que la aspiración continua de las alfombras puede estropearlas, pero la realidad es que la suciedad que queda en las alfombras, puede llegar a romper las fibras y acelerar su desgasto. Esto sucede debido a que la suciedad es abrasiva.
Tras el aspirado, lo ideal sería utilizar una maquina de vapor (vaporetto) con lo que conseguiríamos higienizar la superficie de la alfombra sin la necesidad de utilizar detergentes que podrían estropearla.
¿Conocíais esta forma de limpiar alfombras? ¿Alguna vez habéis utilizado una vaporetto? Contadnos vuestra experiencia.
Equipo Limpiezas Lujambio